domingo, 9 de diciembre de 2018

Reflexiones de una terminal


Terminal es el nombre que llevan estos lugares donde nos concentramos para montarnos en un bus, avión, tren, barco o semejantes, la paradoja es que no solo termina, para muchos ahí empiezan historias de vida


Para mí hoy sería una pausa, de meses de haber tendido una mano a las hermanas de forma oficial, pero de forma inconsciente a mí mismo y a las viejas heridas, meses en los que pase del "tengo que" al "quiero" y con atisbo de "me gusta"

Lo último proviene de un ejercicio personal de explorar las dimensiones del amor, permitirme descubrir que este es unidireccional cuando es real, que el amor de sangre es un constructo social pero si se tiene consciencia de esto último es un gran punto de partida.


Reciprocidad sin duda es aquello que uno espera en el amor, y a nivel de espíritu siempre la hay, solo hay que saber ver lo intangible y no aferrarse a lo tangible, sabiendo reconocer todo el tiempo el amor propio

Y la conclusión es que la vida no concluye, que es un flujo continuo y la experiencia terrenal es poder ser consciente de dicha infinidad y ante cada lección si podemos aprenderla el resultado es lo que decía un viejo amigo ser más grande, más fuerte, más yo...

-J

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